Al igual que el año pasado, los centros de datos en el año que está por comenzar, siguen estando en el punto de mira del mercado inmobiliario, pero ya no serán tan populares como en 2021, de acuerdo con el informe Global Investor Outlook 2022 emitido por Colliers. El motivo es que los altos niveles de demanda cuentan con una limitada oferta de ubicaciones europeas habilitadas para la fibra óptica. En definitiva, hay pocos espacios que cumplan con los requisitos necesarios para consolidar una instalación de características tan exigentes como un centro de datos. En cualquier caso, en el informe queda de manifiesto que los segmentos alternativos más atractivos para inversores son, por orden de prioridad, los relacionados con la investigación científica y la salud (16% del total), las residencias para estudiantes (14%), y los centros de datos (14%).
Además, ciudades como Londres, París, Berlín o Múnich siguen siendo enormemente atractivas y el próximo año gozarán de una gran demanda. El atractivo de las oficinas no está sólo en el sentimiento generalizado de que la demanda no va a desaparecer, especialmente en ciudades que disponen de buenas infraestructuras de transporte y atractivo turístico, comercial y laboral.
Igualmente, la mayor parte de los inversores espera que el acusado desequilibrio entre la demanda y la oferta haga que el valor de las oficinas aumente en un 10 % o más durante los próximos 12 meses.
Inversión responsable
El informe de este año muestra que los criterios ESG (ambientales, sociales y de buen gobierno) ocupan un lugar destacado en las estrategias futuras de inversión, ya que prácticamente tres de cada cuatro inversores los integran en sus estrategias para 2022. El deseo de invertir de forma responsable es tanto una forma de asegurar sus activos de cara al futuro como de dar respuesta a las presiones sociales que les exigen responder ante la crisis climática.
La sostenibilidad está ampliando la brecha entre los nuevos activos de mayor calidad en ubicaciones privilegiadas y activos más antiguos y de segunda mano en los mercados urbanos secundarios. Para proteger sus carteras, los inversores están concentrándose en activos de clase A en los que se prioriza la sostenibilidad y bienestar, al tiempo que se deshacen de los activos obsoletos que corren el riesgo de quedarse fuera del mercado de inversión si no se consideran oportunidades de reconversión que puedan rentabilizar. Es justo la inversión en reposicionamiento de los activos lo que impulsará el volumen de operaciones en el mercado.
Las alianzas impulsarán carteras diversificadas
La pandemia ha introducido en el mercado nuevos riesgos y ha aumentado otros en ciertos activos, por ello los inversores están buscando nuevas formas de garantizarse portfolios resilientes y diversificados, explorando activos especializados como centros de datos, instalaciones relacionadas con la investigación científica y la salud, edificios residenciales asequibles y otras fórmulas “living” que se beneficien de la fuerte correlación entre el mercado residencial y las tendencias demográficas y sociales.
“Las alianzas entre operadores, promotores y fondos, las partnerships locales y las estrategias de fusiones y adquisiciones son una gran opción para los inversores inteligentes que quieran crecer. Los activos alternativos suponen casos de inversión convincentes, pero sus características únicas hacen que sea esencial encontrar al socio adecuado. Hay una necesidad clara de experiencia para cubrir las lagunas de conocimiento y guiar el capital de forma segura, especialmente en los sectores emergentes”, afirma Damian Harrington, jefe de investigación para EMEA y jefe de investigación de Global Capital Markets.