Subir un video en TikTok, archivar emails, jugar online en sitios como marca apuestas casino o descargar una película son acciones que tienen repercusión en el medio ambiente.
Cada una de esas acciones, por muy pequeñas que parezcan, generan gramos de dióxido de carbono debido a la energía que necesitan para hacer funcionar los dispositivos y las redes inalámbricas.
Además, si sumamos cada uno de esos movimientos realizados por más de 4.100 millones de personas diariamente deja de parecer algo pequeño.
Para ser más precisos, según estimaciones de Cumulus Media, una compañía de analítica, cada minuto se envían 8 millones de mensajes por WhatsApp, se reproducen más de 4.3 millones de videos en YouTube y 266.000 horas en Netflix y se realizan 3.7 millones de búsquedas en Google.
Esto, que ha sido analizado durante años, es lo que los expertos llaman la huella medioambiental de Internet.
Internet es el elefante en la habitación
Si bien es cierto que los dispositivos conectados a internet evitan que las personas utilicen otros medios conocidos por contaminantes, de igual forma la tecnología genera un impacto similar.
Por ejemplo, puede parecer más ecológico enviar un correo por internet que utilizar una empresa de envíos tradicionales.
Lo cual es cierto, pero los enormes centros de datos, las redes de comunicación, la energía para fabricar productos, así como también las instalaciones, la refrigeración de los centros, entre otras cosas, requieren de un inmenso consumo de energía.
Sin embargo, aunque está frente a nuestros ojos, se habla poco o nada sobre esta situación. Lo dejamos pasar por alto porque pensamos que otras industrias contaminan más.
Sobre los distintos elementos que hacen que el funcionamiento óptimo del internet se plantean importantes retos para disminuir el consumo.
La huella ecológica de internet en cifras
Según datos de la organización Greenpeace, la huella medioambiental de internet equivale al 7% del consumo de electricidad mundial, aproximadamente.
Igualmente, la organización explica que la industria tecnológica de la comunicación o información genera el 2% de las emisiones de dióxido de carbono. Cifra muy cercana a la que genera la industria de las aerolíneas a nivel mundial.
Expertos aseguran que el daño ecológico seguirá en aumento de la mano con el mayor acceso a nuevos productos o tecnologías. Un claro ejemplo es la red 5G de la que tanto se habla en tiempos recientes.
Hoy se estima que cada persona genera alrededor de 414 kilogramos de dióxido de carbono al año. Claro está, es una cifra estimada, puede ser más o menos, dependiendo del lugar en el que se encuentre cada persona.
Las empresas de internet que menos contaminan
El listado de las empresas tecnológicas o de internet que menos contaminan es encabezado por Apple. El gigante de la manzanita funciona con un 83 % de energías renovables y un 10% de carbón y nuclear.
Más atrás vienen Facebook y Google con un uso de energías renovables del 67% y 56%, respectivamente. Instagram también está en el grupo de las empresas con energías más limpias con 67%.
Cabe destacar que Facebook abrió un centro de datos en Lulea, Suecia, donde el consumo de energía para la refrigeración es mínimo ya que pueden aprovechar las bajas temperaturas del lugar.