Autelsi y Nutanix han dado a conocer los resultados de un estudio sobre el grado de implantación de la nube en las infraestructuras de la Administración Pública. De acuerdo con los resultados, el 70,5% de los organismos consultados -114 entidades públicas- tienen algún plan de modernización tecnológica contemplado. De hecho, tres de cada cuatro planes tienen contemplada algún tipo de nube. La gran ganadora es la cloud privada, elegida por el 44,3% de los encuestados, mientras que la nube híbrida es la opción elegida para el 27,8%, y la nube pública 21,5%. Esto significa que cuatro de cada diez servicios se encuentran alojados en la nube privada.
Respecto al tipo de aplicaciones que se ejecutan en la nube, el correo electrónico es la opción preferida por un 42%, mientras que el alojamiento web y almacenamiento es preferido por el 36%. Pero, en cualquier caso, se trata en su mayoría de aplicaciones que no son críticas, entre las que también se encuentran backup o sede electrónica.
La metodología agile es otro aspecto a destacar en el estudio. Y es que la Administración Pública empieza ya a tener proyectos de este tipo, concretamente cuatro de cada diez organismos. No obstante, el número de proyectos tiene un alcance reducido en cada organización, debido a algunas barreras vinculadas con una falta de adecuación de perfiles, una cultura corporativa reacia a cambios o a la necesidad de aplicar consultoría en estas iniciativas.
Confianza en la nube
El 54% de los encuestados tiene mayor confianza en la nube privada, frente al 22% de la nube híbrida, puesto que se tiene la percepción de un mayor control de la infraestructura e independencia. Las principales prioridades que se buscan respecto a la nube son seguridad (28,1%), escalabilidad (18,7%) y ahorro de costes (16,8%).
Por su parte, las principales barreras siguen siendo las mismas de siempre: los riesgos de seguridad (23,8%), protección de datos (19,9%), dependencia del proveedor (17,9%) y condiciones de contratación (15,5%).
Conclusiones
La nube forma parte inherente de la transformación digital, y las nuevas exigencias ciudadanas llevan a la utilización de este tipo de infraestructuras de datos.
El cambio requiere superar las inseguridades respecto a la nube y modificar la forma de pensar sobre los datos. La evolución hacia la utilización de la nube va en paralelo a la superación de etapas de madurez en función de la experiencia de utilización.
Tendencias esperadas:
- Mayor extensión e intensidad de la utilización de la nube.
- Tránsito desde los servicios complementarios a los servicios esenciales.
- Prestación de servicios avanzados y obtención de mayor independencia a través de las tecnologías en la nube.
- Superación de los inconvenientes de la contratación de servicios en la nube.
- Mayor presencia de personal y de infraestructuras en proveedores de la nube en España.
- Mayor impulso por el papel de los innovadores públicos ante las resistencias de utilización de la nube.