Migrar la arquitectura TI a la cloud es una práctica cada vez más habitual en las empresas, independientemente de su sector y tu titularidad. Sin embargo, esta transición -que ya se está produciendo en mayor o menor medida, según sea el caso-, no está exenta de trabas. Atraídas por la agilidad y flexibilidad que ofrece este modelo, las compañías se convencen de los beneficios que puede conceder a su negocio. Es cuando se ponen manos a la obra, cuando se embarcan en esta “aventura”, cuando se presentan en el camino los obstáculos. Dar el paso está claro, la cuestión es cuándo y cómo.
Data Center Market, en colaboración con Nutanix, reunió en Barcelona a CIO, CTO y responsables de sistemas de diferentes organizaciones para conocer cómo están llevando su particular transformación. Bajo el título, “Estrategias de simplificación. Claves para desplegar de forma efectiva cualquier aplicación en cualquier nube”, representantes de Aigues de Barcelona, Aramark, Banco Sabadell, Cambra de Comerç de Barcelona, Agència de Ciberseguretat de Catalunya, Danone, Grupo Mutuam, ICL Iberia, IESE Business School, La Sirena, MRW, Penguin Random House, Rogasa, Suez y la Universitat Oberta de Catalunya estuvieron presentes en el encuentro.
Cloudificar la infraestructura TI
“Todo el mundo quiere cloudificar su arquitectura, pero no es fácil por el legacy. Ha llegado el momento de rearquitecturar los servicios, teniendo en cuenta que la nube no sólo es un sitio (que puede ser público y privado), sino una forma de hacer las cosas”, señaló Lluís Zamora, Sales Manager Spain NE de Nutanix.
Pero lidiar con la nube no sólo es cuestión de readaptar los sistemas heredados y acondicionarlos a los nuevos requerimientos tecnológicos. Lidiar con la nube también implica saber qué aplicaciones subo o no, los contratos de servicios que firmo y, sobre todo, quién puede acompañarme y asesorarme en ese camino. De nuevo la falta de talento salió a relucir; hay una acuciante carencia de profesionales cloud y los que existen, no son fáciles de retener. A todo ello se suma un inhibidor también recurrente como es la seguridad y otro asunto no menos importante: la abrumadora y vasta oferta de proveedores cloud que hay en el mercado y que no simplifica la elección.