El día 25 de Mayo se cumple justo un año desde la implantación del nuevo Reglamento General de Protección de Datos. Tras este período aún persisten algunos problemas relacionados con la seguridad y la privacidad en muchos puestos de trabajo. Según datos que aporta Fellowes en un completo informe, el 13% de los españoles no cumple con alguno de los protocolos a los que obliga el RGPD en su puesto de trabajo. A pesar de la dificultad de la implantación en los procesos si España se presta a una comparativa con el resto de Europa, los datos mejoran la media europea en un 5% puesto que el grado de incumplimiento es del 18% en la Eurozona.
El dato más revelador es que el 10% de los trabajadores no ha recibido aún información sobre el nuevo Reglamento en su puesto de trabajo. Aun así, somos de los países de la UE que más formación ha ofrecido en este sentido ya que la media europea de trabajadores desinformados es del 17%.
Fellowes hace hincapié en su informe que el papel y su custodia es uno de los elementos más vulnerables en confidencialidad y seguridad de datos. Y es que la ausencia de destructoras de papel dentro de la oficina, casi un 20% de las consultadas, dificulta la destrucción eficaz de documentos confidenciales.
De hecho, el 33% del personal de oficina reconoce que no se deshace de forma eficiente y segura de la destrucción de documentos ya que sólo los rasga por la mitad y no los destruye completamente.
A nivel digital el correo electrónico es la parte de mayor riesgo a pesar de que los protocolos se han instalado con éxito. Aun así siguen existiendo prácticas irregulares ya que poco más de la mitad de los trabajadores entrevistados, el 51%, informa de envíos de correo electrónico a la persona equivocada y un 65% reconoce recibir emails que no iban destinados a ellos.
En cuanto al comportamiento de los envíos casi el 36% de los trabajadores envía mails con copia (CC) en ocasiones en las que no debía hacerlo, en lugar de utilizar CCO. Esto implica que los receptores tienen visibles los datos de contacto.
Este informe recoge, finalmente, otras infracciones basadas en descuidos como los olvidos de memorias USB con documentos confidenciales sin claves que los protejan o el olvido de documentos en espacios públicos, algo que ocurre a un 14% de los trabajadores.
Como soluciones preventivas Fellowes propone la instalación de destructoras en el puesto de trabajo que permitan la eliminación total de información confidencial en papel y, también, el uso de filtros de privacidad informáticos que respeten el RGPD.