El objetivo de cualquier empresa es encontrar nuevas formas de obtener mayor eficiencia, agilidad y opciones de escala en sus centros de datos, tanto en sus cargas de trabajo primarias como secundarias. Migrar a la nube es la solución de moda para las cargas primarias, pero, ¿qué ocurre con las secundarias y con el almacenamiento, que también podrían beneficiarse de dichos objetivos?
Hoy en día existen opciones que permiten obtener valor también de las cargas de trabajo y almacenamiento secundarios, y que también permiten acceder y modificar los datos tanto en ubicaciones locales como en la nube. Se trata de infraestructuras scale-out con las que construir una plataforma de gestión de datos unificada y moderna, capaz de ofrecer las mismas características que la nube pero para entornos de centros de datos on-premise.
Estas son, según Commvault, las tres ventajas principales que ofrece una infraestructura scale-out:
Menores costes de infraestructura: las infraestructuras tradicionales de protección de datos a escala no solo se componen de múltiples capas de hardware, sino que también requieren que muchas organizaciones instalen productos puntuales para proteger el almacenamiento y las cargas de trabajo de aplicaciones específicas. El resultado es una infraestructura compleja que no permite escalar, requiere actualizaciones frecuentes, lo que lleva a costes inmanejables e impredecibles. La tecnología scale-out puede eliminar múltiples capas y reemplazarlas con una única solución que puede admitir todas las aplicaciones, en entornos on-premise y en la nube. El uso de un enfoque unificado de protección de datos en una infraestructura scale-out puede eliminar estos problemas.
Mayor capacidad de recuperación y disponibilidad: la eliminación de múltiples capas de infraestructura de hardware y software puede minimizar el riesgo de inactividad, mejorar la disponibilidad de los datos y limitar los posibles puntos de fallo. La infraestructura scale-out utiliza a menudo codificación de borrado para garantizar que los datos estén disponibles, incluso si se producen fallos en unidades o nodos. Para las implementaciones de recuperación ante desastres, muchas soluciones de protección de datos en una infraestructura scale-out admitirán clusters geodispersos para que los datos estén disponibles cuando y donde se necesiten de forma consistente.
Soluciones de autoservicio: la protección de datos puede ser tediosa, compleja y requerir una gran cantidad de recursos que podrían usarse para proyectos más estratégicos. Las infraestructuras scale-out que utilizan una plataforma unificada de protección de datos pueden automatizar y organizar tareas complejas, lo que permite una mayor eficiencia y minimiza el riesgo de errores humanos. Una plataforma unificada también puede organizar la automatización del flujo de trabajo de manera que las operaciones repetitivas o que consumen mucho tiempo se puedan simplificar en procesos integrales y eficientes.
Las infraestructuras scale-out ofrecen nuevas formas para que las organizaciones protejan, accedan y usen sus datos con mayor eficiencia, fiabilidad y disponibilidad, independientemente de dónde vivan los datos.