En los últimos años, no hay duda de que Digitalización y Sostenibilidad han incrementado su protagonismo y peso en la agenda política y en nuestro día a día. ¿Pero, realmente qué impacto tienen en la estrategia empresarial de las organizaciones? ¿Cuál es la relación que mantienen ambos binomios? ¿Cómo será su evolución y desarrollo en los próximos años? ¿Qué percepción tenemos sobre el proceso de cambio que promoverán y cómo afectará a las empresas?
Si empezamos hablando de transformación digital, no hay duda de que su desarrollo está suponiendo un gran reto para pymes y grandes empresas, posibilitando grandes cambios en sus modelos productivos y operativos. Proceso de transformación, que mantendrá su tendencia creciente en los próximos años, pero que hay que considerar que debe de ir acompañado de un respeto por el medio ambiente y orientado a la mejora de la sociedad, es decir, digitalización y sostenibilidad deberán ir de la mano. Lo que sí está claro es que sea lo que sea lo que hagamos, la tecnología es sólo una herramienta y hay que ponerla al servicio de la sostenibilidad y del ciudadano.
Digitalización y sostenibilidad deberán ir de la mano
Sobre el papel, este es uno de los objetivos (objetivo nº 9) que se marcó Naciones Unidasen su agenda 2030: “Construir infraestructuras resilientes, promover la industrialización sostenible y fomentar la innovación”, siendo por tanto un punto de referencia en donde deberán poner el foco todas las compañías. De este modo, para que una empresa siga teniendo éxito empresarial en el futuro, entrarán en juego dos factores: mantener procesos empresariales sostenibles y una estrategia de TI orientada a la sostenibilidad, aspecto que se ha convertido ya en un “must-have” para muchas empresas, que ya están inmersos en la construcción de una TI sostenible y así reducir el impacto medioambiental.
Esta tendencia continuará y tomará impulso en el futuro, de la mano de normativas gubernamentales que impondrán a las compañías condiciones marco cada vez más estrictas, alineándose así con los acuerdos internacionales. La duda que está sobre la mesa para muchos es… ¿Imponer este tipo de estrategia, no perjudicará a la cuenta de resultados de las empresas? Pues la realidad es que se ha demostrado que aplicar una estrategia empresarial centrada en la sostenibilidad y la protección del medioambiente está siempre alineada a favor de las finanzas de la empresa.
¿Y cómo podemos lograr este cambio?, la respuesta es sencilla. Para empezar, sería necesario cambiar a modelos de software y hardware sostenibles que permitan ahorrar recursos importantes, como la energía. Es decir, a través de cambios en la tecnología de las empresas se pueden regular las condiciones para un uso de la energía más eficiente. Otro punto importante como elemento de mejora de la sostenibilidad, será la apuesta por una gestión sensata y de promoción de incentivos para los empleados respecto al uso de dispositivos de empresa. Un ejemplo es el uso de móviles corporativos, ya que se calcula un incremento de la sostenibilidad empresarial en un 25% si se prolonga la vida útil de los terminales a cuatro años.
Sería necesario cambiar a modelos de software y hardware sostenibles que permitan ahorrar recursos importantes, como la energía
Por otro lado, el uso de la Inteligencia Artificial ayudará a alcanzar los objetivos empresariales, a través de la predicción de aspectos como los niveles de demanda o las rutas de productos, haciendo que mediante algoritmos se logre su optimización. Además, se fomentará la reducción de la huella de CO2 al recogerse datos que ayuden a mejorar y reducir los desplazamientos y la gestión logística y el más importante será la posibilidad de poder evaluar el impacto medioambiental de las empresas, para poder tomar medidas.
¿Y qué percepción tenemos sobre el impacto de la transformación digital y la sostenibilidad en las empresas?, pues según los datos de un estudio realizado por Devoteam, el 53% de los encuestados considera que la apuesta en los últimos años por la sostenibilidad se debe a la importancia que esta tiene para los clientes, frente al 49% que considera que es por cumplir con las expectativas de los empleados y el 44% por parte de los directivos.
Es destacable que más del 40% de los encuestados indicó que la sostenibilidad supone una ventaja competitiva y más del 90% afirmó que la tecnología desempeña un papel importante en sus iniciativas de sostenibilidad. Estos datos indican que la sostenibilidad ya está muy presente en las estrategias empresariales y eso es alentador, porque se observa el camino que están iniciando las compañías y que sin duda marcará el futuro de éstas.
¿Cuáles serán los próximos pasos? Sin duda, si queremos avanzar en el cumplimiento de Objetivos de Desarrollo Sostenible, las empresas deben ser capaces de supervisar y hacer un seguimiento de sus iniciativas de sostenibilidad como parte de la gestión diaria e incorporar este seguimiento dentro de las agendas de Dirección y procesos de la Organización.
A corto plazo, el contexto geopolítico puede ser el primer examen para las organizaciones en España y Europa en materia de sostenibilidad energética y control de activos IT si se mantiene la tendencia alcista de los recursos energéticos y la carestía de componentes electrónicos.
¡Sin duda, una prueba que medirá el estado de salud de la relación entre sostenibilidad y transformación digital!
