La sostenibilidad es el gran reto que tienen ante sí los data center. Ya sean grandes o pequeños, su número va en aumento a un ritmo considerable y su gasto de energía también. Mientras la sociedad y las organizaciones sigan generando y consumiendo datos desorbitadamente, se necesitarán más y más CPD con más y más servidores y microprocesadores más potentes para respaldar esta producción, es decir, cada vez mayores espacios de almacenamiento que trabajen a velocidades superiores. Y no tiene visos de que esto vaya a parar, sino todo lo contrario: continúa incrementándose el tráfico de datos y las conexiones 5G e IoT con exigencias de entrega en tiempo real; llegan la computación cuántica, las redes cognitivas, la IA, el Big Data y el blockchain; avanza aceleradamente la digitalización y la automatización; se asienta el edge computing; los hiperescalares y los colocation se expanden… y todo ello supone un auténtico y acuciante problema para el planeta.
Para leer más, haga click aquí