Un CPD distribuido y modular, conectado a una red mundial

La compañía ha invertido 10 millones de euros en la primera fase de este centro de datos que cuenta con 4.500 metros cuadrados, de los cuales 3.545 metros son de suelo técnico, y está dividido en 13 salas, siendo cada una de ellas independiente, como si de 13 data centres se tratara.

Publicado el 03 Abr 2014

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Con más de una década de existencia –vio la luz en 2002– Interoute ha sabido evolucionar a lo largo de su andadura sin perder nunca de vista su negocio clave consistente en proporcionar servicios empleando su red internacional. Eso no ha impedido que la multinacional de origen británico haya entrado en otros mercados igualmente fructíferos como el de los centros de datos, que se han adaptado a su propuesta global como anillo al dedo.

A día de hoy, Interoute no sólo es propietaria y opera una red privada de voz y datos a la cabeza de Europa y una de las más avanzadas del mundo, con más de 60.000 kilómetros de fibra iluminada, sino también dispone de once centros de datos integrados en su infraestructura, además de 31 centros especializados en alojamiento compartido de equipos (co-location) integrados en la red y conexiones con 140 centros de datos gestionados por terceros en toda Europa.

Allá por 2004, la compañía desembarcaba en nuestro país con su propuesta de conectividad y tráfico de voz y datos para posteriormente replicar el modelo implantado en otros países e ir añadiendo más servicios. Para cubrir la pata de centros de datos, Interoute contaba con espacio contratado en CPDs de terceros proveedores ubicados en Madrid. Ese era el escenario hasta este 2014. El pasado mes de febrero, la multinacional inauguraba oficialmente en la capital española un data centre distribuido o DDC, por sus siglas en inglés. Se trata de uno de los centros más innovadores de Interoute y ha sido definido por el consejero delegado de la corporación, Gareth Williams, como “un centro, al igual que los últimos tres CPDs construidos por Interoute, pensado para satisfacer la creciente demanda de conectividad, alojamiento y servicios cloud de empresas y proveedores de servicios en España y Europa”.

Situado en el Polígono Empresarial Cardenal Herrera Oria, lejos de otras zonas de la capital con mayor concentración de data centres –lo que supone un valor añadido al CPD ya que puede servir de reclamo para aquellas empresas que busquen un centro de respaldo a cierta distancia del centro principal que ya tengan– el edificio se levanta en una zona bien comunicada al norte de Madrid, a diez kilómetros del aeropuerto y a 800 metros de importantes vías de comunicación por carretera y ferrocarril.

Albergar hasta trece salas
El centro de datos dispone de cuatro plantas y cuenta con 4.500 metros cuadrados, 600 de los cuales están dedicados a oficinas y 3.545 se utilizarán para espacio técnico. El CPD permite proporcionar hasta 32 kW por bastidor. Está diseñado modularmente y pensado para disponer de 13 salas, “siendo cada una de las salas un centro de datos en sí mismo”, explica Diego Matas, director general de Interoute Iberia.

El espacio contratado por Interoute a centros de terceros hasta la creación de este DDC se irá desocupando. La idea es trasladar al mayor número de clientes a las salas del nuevo centro de la multinacional, comenzando por aquellos que solo demandan servicios cloud. “Una vez que se haya culminado el traslado se habrán llenado prácticamente dos de las 13 salas del CPD”, advierte Matas.

La compañía ha invertido hasta el momento, es decir, en esta primera fase de construcción del centro de datos, “unos diez millones de euros”. El diseño ha sido realizado por el propio equipo de Interoute, mientras que para la parte de implantación e ingeniería han contado con la ayuda de Emerald y la adjudicación del concurso de construcción fue a manos de CBRE.

El diseño modular (con un despliegue en 13 salas) se ha realizado pensando en la expansión, la redundancia y el crecimiento adaptado a las necesidades de los clientes, utilizando la última infraestructura tecnológica disponible en cada momento. Cada una de las salas es totalmente independiente en cuanto a alimentación y refrigeración, de hecho, un factor diferenciador clave es la utilización de Sistemas de Alimentación Ininterrumpida (SAIs) y de refrigeración modulares y descentralizados, que permiten que cada una de las 13 salas pueda ser considerada como un centro de datos dentro del centro de datos. A su vez, cada sala dispone de tres niveles de protección contra incendios que utilizan sistemas no perjudiciales para la actividad humana ni para la operación de los restantes equipos de la sala. Los bastidores de alojamiento de los equipos de los clientes, que pueden soportar hasta 1.300 kilogramos, cuentan con accesos protegidos mediante tarjetas individuales.

La refrigeración se lleva a cabo desde cada fila de bastidores, que también cuenta con su propia infraestructura de alimentación y extinción de incendios en configuración redundante, diversificada y descentralizada.

El edificio dispone de dos acometidas eléctricas de alta tensión redundantes, con una potencia nominal de hasta 3.000 kW y la configuración de los SAIs es de 2N por sala. Mientras que para la refrigeración se ha optado por dos sistemas de 245 kW cada uno en configuración N+1, que proporcionan una capacidad de enfriamiento de hasta 7×245 kW en configuración 2N en las salas de equipos.

En cuanto al acondicionamiento del aire, se ha optado por una temperatura de 23 grados centígrados (con una variación de +/- tres grados), siendo la humedad del 50 % (con una variación de +/- diez).

Para garantizar la seguridad tanto física como lógica, el edificio está controlado tanto directamente como de forma remota 24/7/365, incluyendo monitorización de instalaciones críticas.

En cuanto a la conectividad, al centro de datos llegan cuatro acometidas de fibra independientes con diversidad de trayectos dentro del edificio. El CPD conecta directamente a la red troncal de 100 G de Interoute. Además, ha sido concebido como un data center neutral contando con un punto neutro de interconexión entre operadores (Carrier Neutral Facility), que permite a los clientes acceder a múltiples redes de terceros, concretamente a seis proveedores nacionales y dos operadores internacionales.

Integrado en la red paneuropea
El centro de datos está integrado en la extensa red paneuropea de Interoute y añade una nueva ubicación física a la plataforma Unified ICT de Interoute. Esta plataforma permite a los clientes crear o adquirir como servicio arquitecturas de centros de datos, ya sean físicas, virtuales o híbridas, y pueden ser distribuidas o conectadas con cualquier país o zona geográfica a la velocidad de la luz.

La nueva instalación de Madrid también se integra con el resto de centros de datos de Interoute en Ámsterdam, Berlín, Estocolmo, Gante, Ginebra, Londres, Múnich, París y Zúrich. Con recursos informáticos integrados directamente en los 60.000 kilómetros de fibra óptica que forman la red de Interoute, la compañía ofrece soluciones escalables, locales, regionales y paneuropeas sin perder la velocidad, la flexibilidad o el control de la red. Los clientes pueden elegir dónde ubicar sus datos en el centro de datos de Madrid, o en cualquier otro data centre de Interoute que mejor se adapte a sus necesidades de negocio y para cumplir con las regulaciones legales en materia de datos. Los clientes también pueden aprovechar la red MPLS de Interoute con velocidades de hasta 100 Gbps para crear arquitecturas conectadas, seguras, elásticas y dispersas geográficamente.

Un centro de datos 3.0
El nuevo centro de datos de Madrid responde al proyecto de Interoute de “salir del modelo inmobiliario tradicional de CPDs basado en ‘real state’, apostando por otro altamente distribuido y virtual”, asegura Matas. “Si muchos datacentres han evolucionado hacia un modelo 2.0, donde se mejora sensiblemente en cuanto a eficiencia energética y optimización de la infraestructura, nosotros apostamos por el Data Centre 3.0, donde la frontera entre la parte lógica y la parte física se rompe. Hemos diseñado un centro distribuido, modular, escalable y altamente conectado donde queremos alojar las aplicaciones del cliente y no tanto sus equipos, aunque pongamos equipamiento para soportar esas aplicaciones; de hecho, ofrecemos la posibilidad de que la transferencia de datos entre armarios de clientes pueda ser gratuita. Nuestro objetivo es distribuir aplicaciones de los clientes y dar servicios en la nube”.

Por otra parte, el centro de datos también complementa la oferta de Virtual Data Centre (VDC) de Interoute, lanzada en 2012 y basada en ofrecer Infraestructura como Servicio (IaaS) que incluye aplicaciones y recursos de almacenamiento de datos y procesamiento bajo demanda, integrados completamente en la infraestructura TIC de cada empresa. Se trata de una propuesta de cloud computing capaz de atender las necesidades de todo tipo de plataforma en la nube, tanto privadas, como públicas o híbridas. La multinacional ya ha desplegado seis Virtual Data Centre en Europa, el más reciente se abrió este mismo año en Milán y se sumó a los ya existentes en Ámsterdam, Berlín, Ginebra, Londres y París. La intención de Interoute es abrir dos más este 2014, uno en Nueva York y otro en Hong-Kong.

Solicite su visita al nuevo centro de datos de última generación de Interoute www.interoute.es/lp-centro-de-datos-distribuido-Madrid

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Cristina López

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