La tecnología Flash va a revolucionar el mercado del almacenamiento. Y a las cifras de venta se puede uno remitir para constatarlo. El negocio de los sistemas externos de almacenamiento (ESS) cayó en EMEA (Europa, Oriente Medio y África) un 11% en el segundo trimestre del año, hasta los 1.630 millones de dólares, según IDC.
Más específicamente, el negocio de los sistemas de gama alta cedió un 33% en la región. Sin embargo, los sistemas con memoria Flash incorporada crecieron por encima del 10%, sobre todo impulsados por los all-flash arrays (equipos que han sustituido todos los discos duros por circuitos de memoria), que doblaron en términos de facturación (crecieron un 113% en la región).
IDC indica que el mercado de almacenamiento ha sufrido el impacto de la apreciación del dólar. Además, los fabricantes se han encontrado con un alargamiento de los ciclos de compra e inestabilidad económica en la zona. Adicionalmente, la adopción de tecnologías hiperconvergentes para el centro de datos o de soluciones de almacenamiento basado en software están canibalizando las ventas de equipos de storage.
Silvia Cosso, analista senior de IDC, dice que la tecnología Flash supone la mitad de los ingresos por la venta de sistemas AFA (all-flash arrays) y HFA (sistemas híbridos). Además, IDC indica que los fabricantes de marca blanca están viviendo un buen momento en Europa, gracias a la adopción por parte de las empresas de sistemas de almacenamiento en la nube pública.