Tradicionalmente, la protección de datos ha abordado cuestiones relacionadas con el almacenamiento, el acceso y la gestión de datos, mientras que las soluciones que previenen los ciberataques, como los cortafuegos y los antivirus, entraban en el área de la seguridad. Sin embargo, estamos viendo cómo estas dos entidades, antes separadas, se fusionan, y las organizaciones ya no pueden permitirse tener equipos diferentes que las gestionen. Reconocer que una estrategia de protección de datos debe incluir la seguridad en su núcleo es lo que permitirá alcanzar una verdadera ciberresiliencia.
Reconocer que una estrategia de protección de datos debe incluir la seguridad en su núcleo es lo que permitirá alcanzar una verdadera ciberresiliencia
Esto se debe a que, en los últimos años, los malos actores han cambiado de táctica, obligando a las organizaciones a ajustar también su estrategia. Antes, los ciberdelincuentes encriptaban los datos para que las organizaciones no pudieran acceder a ellos ni comprenderlos. Ahora, se llevan una copia de los datos y amenazan con publicarlos o dárselos a la competencia si no se paga un rescate.
Las medidas preventivas deben ir de la mano del backup
Como resultado, las medidas preventivas deben ir de la mano del backup, y una estrategia sólida de protección de datos debe tener la seguridad en el centro de la misma. Esto también significa que el sector tiene que pensar de forma más inteligente sobre el backup: seguirá siendo imprescindible, pero debe adaptarse al panorama de las amenazas. Por suerte, la tecnología está al alcance de la mano para ayudar e impulsar la industria de la protección de datos.
Conseguir una ciberresiliencia empresarial real es algo más que construir muros más altos o fosos más profundos. Requiere un nuevo enfoque que contemple de forma holística todo el panorama, desde la mejor protección y seguridad de datos de su clase hasta la inteligencia de datos impulsada por IA y la recuperación ultrarrápida. Y la necesidad de una ciberresiliencia moderna nunca ha sido mayor. Según un reciente estudio de IDC, el 61% de los ITOps & SecOps creen que la pérdida de datos en los próximos 12 meses es “probable” o “muy probable”.
Para construir una estrategia verdaderamente ciberresiliente, las organizaciones deben asegurarse de que sus equipos de TI y de seguridad se unen para trabajar por este objetivo común y mantener sus datos bajo llave
Los datos tienen un valor increíble, y los ciberdelincuentes no se detendrán ante nada para obtenerlos, sin importar las desastrosas consecuencias para una organización o sus clientes. Tener backups guardados en múltiples ubicaciones es una necesidad, pero, en realidad, el objetivo es evitar que los atacantes accedan a los datos en primer lugar. Para construir una estrategia verdaderamente ciberresiliente, las organizaciones deben asegurarse de que sus equipos de TI y de seguridad se unen para trabajar por este objetivo común y mantener sus datos bajo llave.