Un estudio global realizado por el IBM ha revelado que, aunque la mayoría de las organizaciones reconocen que la sostenibilidad es importante para su estrategia de negocio, muchos líderes de alto nivel tienen dificultades para financiar sus inversiones en sostenibilidad. Los datos recogidos de 5.000 directivos de todo el mundo resaltan que las organizaciones que integran la sostenibilidad en sus operaciones obtienen mejores resultados financieros y de sostenibilidad, al tiempo que gastan menos dinero que sus competidores.
El estudio de IBM reveló que casi un tercio (30%) de los ejecutivos encuestados a nivel global (sólo el 16% en España) afirma haber realizado avances significativos en la ejecución de su estrategia de sostenibilidad -frente al 10% hace un año a nivel mundial-, pero convertir las ambiciones en impacto sigue siendo un reto. Casi la mitad de los directivos encuestados en España (46%) tienen dificultades para financiar las inversiones en sostenibilidad. Además, seis de cada diez a nivel global afirman que tienen que hacer concesiones entre los resultados financieros y los de sostenibilidad (55% en España).
Las empresas a nivel global que integran la sostenibilidad en profundidad en sus operaciones muestran una clara diferencia en los resultados respecto a aquellas que se centran exclusivamente en áreas como la elaboración de informes normativos o que abordan la sostenibilidad como proyecto corporativo. Las organizaciones que integran la sostenibilidad tienen un 75% más de probabilidades de atribuir una mejora de los ingresos a sus esfuerzos de sostenibilidad y un 52% más de probabilidades de superar a sus competidores en rentabilidad.
Los resultados indican que muchas organizaciones se centran en la gestión de requisitos de información complejos y variados en lugar de en el valor y los resultados empresariales reales. El estudio revela que el gasto en informes de sostenibilidad supera al gasto en innovación en sostenibilidad en un 43% tanto a nivel local como global. Sólo el 31% (28% en España) de los ejecutivos encuestados afirma estar incorporando en gran medida los datos y conocimientos sobre sostenibilidad a las mejoras operativas, mientras que el 14% (11% en España) dice hacerlo con iniciativas de innovación.
“La forma en la que se plantea la sostenibilidad en una empresa puede estar frenándola. No hay soluciones rápidas. La sostenibilidad requiere intencionalidad y una visión corporativa compartida”, afirma Oday Abbosh, Managing Partner, Sustainability Services, IBM Consulting. “La sostenibilidad debe formar parte de las operaciones cotidianas y no considerarse únicamente una tarea para cumplir o un ejercicio de elaboración de informes. Al integrar la sostenibilidad en su negocio, las organizaciones tienen más probabilidades de impulsar la innovación interna, atraer y retener talento cualificado, y estar mejor posicionadas para ofrecer tanto un impacto medioambiental positivo como resultados económicos”.
Los principales retos
Las organizaciones siguen buscando la sostenibilidad, pero la financiación, la capacitación y la puesta en marcha de acciones siguen siendo un reto. El 75% de los ejecutivos encuestados (76% en España) está de acuerdo en que la sostenibilidad contribuye a mejorar los resultados empresariales, y el 69% en España (76% global) está de acuerdo en que la sostenibilidad es fundamental para su estrategia empresarial.
El 39% de los ejecutivos globales también citan la falta de habilidades necesarias como el principal obstáculo para el progreso de la sostenibilidad. A pesar de que la mayoría de las organizaciones no incorporan la sostenibilidad en sus iniciativas de innovación, los líderes esperan que la IA generativa ayude a potenciar los esfuerzos de sostenibilidad.
El 74% de los ejecutivos globales y un 65% a nivel local está de acuerdo en que la IA generativa será importante para sus medidas de sostenibilidad.
Además, el 53% de estas organizaciones globales afirma que los beneficios empresariales son esenciales para justificar las inversiones en sostenibilidad; sólo el 17% afirma que el cumplimiento de los objetivos de sostenibilidad es suficiente por sí mismo para justificar la inversión.