Capgemini anuncia la apertura de un Centro de Innovación Aplicada en España, destinado a acelerar los procesos de innovación empresarial de forma colaborativa con los clientes, partners, startups, universidades y otros partícipes del engranaje de la Investigación, el Desarrollo y la Innovación ( I+D+i). Alojado en la nueva sede de la compañía en Madrid, en el edificio Oxxeo, este espacio forma parte de la red mundial de centros Applied Innovation Exchange (AIE) de Capgemini, desde los que se construyen y establecen modelos de cocreación de alto rendimiento, con un fuerte componente práctico, para apoyar y guiar a las compañías en procesos rápidos de experimentación e innovación para su negocio. En este sentido, el AIE de Madrid tiene dos objetivos principales:
- Permitir a las empresas conocer las últimas innovaciones y experimentar con ellas dentro de su sector.
- Servir de enlace entre los clientes y el ecosistema único de diseñadores, tecnólogos, expertos del sector, socios empresariales y tecnológicos, académicos, centros de investigación y startups de Capgemini.
Como parte de la red global de AIE de Capgemini, el centro de Madrid trabajará estrechamente con el resto de centros de innovación del mundo —incluyendo los de San Francisco, Nueva York, Paris, Múnich, Singapur, Toronto, Melbourne o Estocolmo— y con otros laboratorios y los centros de excelencia como el AMS Center in Murcia, el Security Operations Center (SOC) en Asturias y el Agile Delivery Center Valencia.
Francisco Bermúdez, consejero delegado de Capgemini España, comenta que “es un orgullopara nosotros inaugurar un espacio de este tipo en España. A través del AIE proporcionaremos un marco de experimentación y metodologías pensadas para que nuestros clientes puedan aprovechar la red de intercambio de conocimiento y, de esta forma, poder conducir procesos de innovación aplicada y abierta con la versatilidad que les exige el mercado”.
El Centro de Innovación Aplicada de Capgemini en Madrid contempla herramientas y métodos para conducir las diferentes fases que comprende el proceso de desarrollo: la exploración e identificación de las ideas; el diseño de primeros conceptos y prototipos; la implementación posterior en la organización, con pruebas piloto y posteriormente a escala, de forma alineada con la cultura de la empresa; ayudando así a que las organizaciones mantengan el ritmo de la innovación y evolucionen en su cultura digital, identificando maneras de sortear la resistencia al cambio y de promover protocolos.
