Durante varias décadas he seguido la evolución del sector del almacenamiento de información y me parece fascinante el modo en que se han conseguido resolver las necesidades de muchas de las empresas internacionales mediante el almacenamiento en la nube. Hoy me gustaría compartir algunas observaciones recientes sobre la evolución del almacenamiento en la nube y citar algunos ejemplos de las últimas innovaciones de Google que están ampliando los límites de lo posible para empresas de todo el mundo.
La evolución del almacenamiento en la nube
Muchos de nuestros clientes, con necesidades muy variadas, están desplazando a la nube cargas de trabajo cada vez mayores que implican datos de gran riqueza. Los datos que recopilan los clientes son más valiosos que nunca y, antes de proceder a analizarlos, necesitan centralizarlos y normalizarlos, ya que proceden de distintas fuentes. El almacenamiento se está convirtiendo en un sustrato común indispensable para crear servicios de alto valor, como lagos de datos, modelización y simulación, big data/HTC e inteligencia artificial y aprendizaje automático. Todas estas aplicaciones exigen flexibilidad en el almacenamiento de objetos, capacidad de gestión del almacenamiento de archivos y un almacenamiento en bloques de alto rendimiento, todo ello en una misma plataforma.
Somos conscientes de la evolución de las necesidades y, por ello, hemos asumido el compromiso de poner a punto productos que ofrezcan rendimiento y una escala a la medida de las empresas, que sean compatibles con aplicaciones de uso intensivo de datos, que proporcionen información útil a las empresas y, que, al mismo tiempo, resulten fáciles de gestionar y protejan los datos frente a cualquier pérdida o desastre.
Con el fin de facilitar la disponibilidad de aplicaciones de escala continental y la centralización de los datos, hemos ampliado el número de regiones dobles en Cloud Storage, así como las funciones de replicación turbo, que anunciamos el año pasado y que ya se encuentran disponibles en nueve regiones y tres continentes. Esta función permite disponer de un bucket único del tamaño de un continente con un RTO (objetivo de tiempo de recuperación) de cero y, opcionalmente, un RPO (objetivo de punto de recuperación) inferior a 15 minutos. Igualmente, facilita el diseño de aplicaciones ya que aporta una alta disponibilidad y permite emplear un único conjunto de API con independencia de dónde se almacenen los datos.
Evolución del almacenamiento en la nube para responder a necesidades dinámicas de los clientes
En el evento digital para clientes de hoy A Spotlight on Storage hemos anunciado una serie de novedades en materia de almacenamiento. Me gustaría repasar brevemente algunas de ellas, puesto que respaldan nuestros compromisos.
En lo que respecta a nuestras soluciones adaptadas a las empresas, hemos anunciado Google Cloud Hyperdisk, nuestro disco persistente de última generación con capacidad para ajustar el rendimiento de un almacenamiento en bloques a la carga de trabajo, de manera fácil y dinámica. Permite que una empresa haga un aprovisionamiento de IOPS y throughput independiente para distintas aplicaciones, con la posibilidad de modificar de forma adaptativa el rendimiento de cada aplicación a lo largo del tiempo.
Otra novedad es el lanzamiento de los archivos compartidos múltiples de Filestore para GKE. Con este nuevo servicio, los administradores pueden crear fácilmente una instancia de Filestore y asignarle usos compartidos simultáneos de porciones del almacenamiento, en uno o miles de clústeres de GKE. También ofrece mejoras de almacenamiento en segundo plano al mismo tiempo que se ejecuta la aplicación en GKE, y un SLA de disponibilidad de almacenamiento regional del 99,99%.
Los comentarios de nuestros clientes se tienen en cuenta en la evolución de nuestros productos de almacenamiento, que deben dar soporte a aplicaciones con uso intensivo de datos. Así, hemos desarrollado una nueva función de Cloud Storage, llamada Autoclass, que facilita la gestión del almacenamiento y ayuda a optimizar los costes. Esta función mueve automáticamente objetos a clases de almacenamiento más “frías” o más “calientes” basándose en el momento del último acceso y de acuerdo con políticas predefinidas. Nos hemos dado cuenta de que muchas empresas hacen este proceso manualmente y nos llena de satisfacción poder ofrecer esta opción, más sencilla y automatizada, basada en políticas, con la que se optimizan los costes de Cloud Storage. En palabras de Ian Mathews, cofundador de la plataforma de ciencia de datos Redivis: “Desarrollar herramientas de optimización de costes por nuestra cuenta no sólo consumiría valiosos recursos de ingeniería, sino que nos expondría a cometer errores potencialmente costosos, que podrían acarrear gastos de recuperación de datos archivados prematuramente. Autoclass nos ayuda a reducir los costes de almacenamiento y a hacerlos más predecibles, de una forma sencilla y automatizada”.
También queremos que nuestros clientes puedan obtener más información útil sobre las opciones de almacenamiento, para simplificar la gestión y la optimización. Nuestro nuevo Storage Insights ofrece información procesable sobre los objetos que nuestros clientes tienen almacenados en Cloud Storage: el objetivo es que los administradores dispongan de la información necesaria para tomar decisiones documentadas sobre la gestión del almacenamiento, tanto si sus objetos se cuentan por millones o por billones. Responde a preguntas como “¿Cuántos objetos hay? ¿Y en qué bucket se encuentran?” Cuando se combina con otros productos como BigQuery, las empresas pueden crear paneles de control específicos para visualizar la información sobre los datos que tienen almacenados. Las posibilidades son extraordinarias.
Por último, hemos anunciado un servicio de Backup y recuperación ante desastres de Google Cloud, que ayuda a proteger las aplicaciones y datos de mayor valor. Este servicio es una solución de protección de datos totalmente integrada para aplicaciones y bases de datos críticas (por ejemplo, Google Cloud VMware Engine, Compute Engine o bases de datos como SAP HANA). Permite gestionar de forma centralizada las políticas de protección de datos y recuperación de desastres directamente desde la consola de Google Cloud, y proteger completamente las bases de datos y las aplicaciones con unos pocos clics de ratón.
Hay muchas opciones de almacenamiento: esto es lo que nos diferencia
Cuando una empresa decide construir su negocio en Google Cloud, en realidad está eligiendo los mismos cimientos que utilizamos en Google para aplicaciones como Fotos, YouTube y Gmail, presentes en todo el mundo. Este enfoque de escala planetaria, que hemos ido desarrollando a lo largo de los últimos 20 años, hace posible que Google Cloud ofrezca servicios de alto rendimiento con una escala de exabytes a empresas y organizaciones con vocación digital. Nuestra infraestructura de almacenamiento se llama Colossus. Consiste en un sistema de archivo a nivel de clúster que almacena y permite gestionar y que, además, ofrece servicios de almacenamiento como Cloud Storage, Persistent Disk, Hyperdisk o Filestore, con la disponibilidad, el rendimiento y la durabilidad que necesitan las organizaciones.
Si además le añadimos la avanzada red troncal exclusiva de Google Cloud con sus 173 ubicaciones edge y prácticamente el triple de rendimiento que AWS y Azure… seguro que empieza a quedar claro por qué nuestra infraestructura es radicalmente diferente. Nuestra red global, combinada con nuestros productos de computación y almacenamiento desagregados basados en Colossus, proporcionan a las aplicaciones de nuestros clientes grandes ventajas en términos de velocidad y resiliencia.
