En primer lugar, cuénteme un poco más sobre EllaLink y el reciente anclaje en Portugal
EllaLink es una empresa independiente y privada con central en Irlanda y cuyo principal accionista es Marguerite II, un fondo de capital paneuropeo especializado en los sectores de energía, transporte e infraestructura digital. Como carrier neutral, ofrecemos capacidad a través de una plataforma exprés óptica segura, diversa, abierta y rápida que conecta Europa con América Latina. Sin necesidad de pasar por Estados Unidos, nuestra ruta es diferente siendo la más corta para unir estos continentes, por lo que estamos reduciendo un 50% la latencia entre ellos. Actualmente “la nueva divisa es la latencia”, es decir, lo que aporta valor es la velocidad en la que te conectas y la cantidad de datos que puedes comunicar.
Construido por Alcatel Submarine Networks, se trata de una red de casi 6.000 kilómetros con capacidad de 72 Tbps a través de cuatro pares de fibra que va desde Sines (Portugal) hasta Fortaleza (Brasil), pasando por Lisboa, Madrid (Equinix e Interxion), Marsella, Sao Paulo y Río de Janeiro. El proceso va muy avanzado. El cable amarró en Brasil y va camino de Europa. Esta semana ha llegado a Madeira y en febrero lo hará en Cabo Verde.
En mayo, EllaLink estará listo para comercializar servicios.
¿Qué importancia tienen los cables submarinos para los centros de datos?
Los cables submarinos transportan un 98% de los datos internacionales entre clientes. Los satélites son una buena plataforma para distribuir información en zonas donde no hay infraestructura terrestre desplegada y dan mucha cobertura, sin embargo, casi todas las comunicaciones internacionales van por cable submarino. Además, entorno a un 90% del tráfico de datos internacionales va de CPD a CPD. Hay una relación directa, una simbiosis muy potente entre data center y cables, tanto terrestres como submarinos. Anteriormente los cables se quedaban en la playa, ahora ya van a los centros de datos.
¿Cómo se monta un cable de estas características y cuánto tiempo se tarda en hacerlo?
Primero hay un proceso de financiación, luego otro de construcción y finalmente otro de explotación. La financiación suele tardar unos cuantos años y en construirlo aproximadamente dos. Antes se ha hecho un diseño sobre planos definiendo el itinerario a seguir. Barcos con equipamiento científico estudian durante meses la ruta, analizando el fondo marino, evitando áreas volcánicas y protegidas. Cuando llega a la costa, el cable se entierra y para ello se debe buscar una zona adecuada. Tras este análisis se fabrica el cable y los repetidores. Y este proceso acaba con la carga de esta infraestructura en los navíos y su posterior despliegue. Por lo general, dos barcos van tirando cable desde cada extremo hasta que se juntan.
¿Cómo se lleva a cabo el mantenimiento de estas infraestructuras? ¿Cómo se repara una avería?
R: Respecto al mantenimiento existen una serie de asociaciones, públicas y privadas, provistas de una flota de barcos muy especializados que están preparados para hacer reparaciones con equipamiento específico y robots cuando se produce alguna avería o se detecta algún corte en un punto determinado.
Debajo de mares y océanos hay auténticas autopistas, ¿cuáles son las nuevas rutas transoceánicas que ese están definiendo en la actualidad?
Con más de 1 millón de kilómetros de cables submarinos desplegados para conectar el mundo, la ruta más establecida es la del Atlántico Norte con cerca de 17 cables. No obstante, muchas de estas infraestructuras se están quedando viejas y se están renovando con soluciones de más capacidad, con más pares de fibra. Ahora se está reforzando el Ártico y también la zona oeste de África.
¿Qué peso tienen estos cables para servicios telco generales y para intereses particulares de los gigantes de la nube?
Como he dicho antes, el 98% de la conectividad internacional va por esos cables. Sin embargo, entre un 60 y 70% del tráfico de Internet procede de los GAFAM (Google, Amazon, Facebook, Apple y Microsoft). Estas compañías ya no son sólo OTT puesto que poseen tanta infraestructura propia o más que muchos operadores. De hecho, casi el 90% de la capacidad en el Atlántico Norte es de los hiperescalares. Necesitan tanto ancho de banda que están invirtiendo en sus propios cables porque los proveedores no pueden seguir su ritmo de crecimiento. Así, en vez de comprárselo a su operadora, son dueños de su infraestructura. Su estrategia es implantarse en los data center, que es donde se mueven datos.
¿Qué papel ocupa España, e Iberia por extensión, como hub estratégico?
Hemos visto que Marsella es un hub importante para llegar a Asia. La ciudad francesa está desplazando el centro de gravedad de las comunicaciones en Europa hacia el sur. Se está creando un nuevo corredor de datos que va hacia la Península Ibérica. Y en este contexto, Sines, en Portugal, y Madrid, en España, tienen mucho que decir.
Sines albergará en el futuro centros de datos. Se perfila como un hub de conectividad de cables submarinos y CDP muy importante. Se trata de un enclave que tiene mucha potencia, fibra y terreno. Nosotros hemos sido los primeros en llegar allí, pero se ve mucho interés en el mercado.
Por otra parte, Madrid tradicionalmente era la esquina de la red, pero en los últimos tres o cuatro años se ha multiplicado por 5 la demanda de potencia para CPD en esta ciudad. Y esto es una prueba, una señal de que está teniendo una explosión en el número de centro de datos, de que el despliegue de cable submarino, de infraestructura terrestre y de data center se está juntando.
Desde un punto de vista técnico, ¿qué velocidades y capacidades futuras tendrán los cables submarinos?
Depende de los tipos de cable y las distancias que recorran (si son transoceánicos, con o sin repetición…). Una de las principales tendencias consiste en aumentar el número de pares de fibra por cable. Ya hablamos de 16 pares e incluso de 32. Son sistemas multi terabyte, entre 200 y 300 TB.
Finalmente, ¿cuáles son las principales tendencias del sector?
R: EllaLink ha sido el primer cable comercial en utilizar la tecnología DAS (Distributed Acoustic Sensing) que permite hacer lecturas de las vibraciones en el agua y realizar análisis sísmicos. No obstante, el mundo del cable submarino es muy tradicional y la gran tendencia del sector será el incremento en el número de pares de fibra.
En el año 2000 hubo un boom de este mercado, se invirtió mucho en él. Ahora, sabiendo que la vida útil de estas infraestructuras es de unos 20 años, llega un nuevo ciclo de renovación. En los próximos 7 años el valor de este mercado crecerá un 132% según Research and Markets. Las infraestructuras de telecomunicaciones se están convirtiendo en infraestructuras críticas. Y tanto las terrestres como las marinas han aguantado el estrés de este momento de pandemia y ahora se tienen que actualizar.