La escasez de agua y los riesgos de inundaciones son desafíos clave en España, especialmente en Aragón, donde las condiciones climáticas y la demanda agrícola ejercen presión sobre la red hídrica. En respuesta a estos problemas, nuevas iniciativas impulsadas por inteligencia artificial están modernizando la gestión del agua en Zaragoza y Huesca, con el objetivo de reducir el riesgo de inundaciones y optimizar el uso del agua en la agricultura. Amazon Web Services (AWS) ha anunciado su colaboración en estos proyectos, que buscan mejorar la resiliencia hídrica en la región mediante tecnología avanzada y renovación de infraestructuras.
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La nueva red hídrica inteligente
El Ayuntamiento de Zaragoza ha iniciado un proyecto para prevenir inundaciones con un sistema de alerta temprana basado en la nube. La tecnología permitirá monitorear en tiempo real las condiciones meteorológicas y el flujo de agua, mejorando la capacidad de respuesta ante emergencias. La combinación de sensores inteligentes, servicios IoT y modelos predictivos de IA proporcionará información clave para evitar catástrofes como las ocurridas en 2023, cuando las inundaciones en la ciudad causaron daños por 125 millones de euros y afectarán infraestructuras esenciales, como el tren de alta velocidad.
Además, se desarrollará infraestructura en el ‘Barranco de la Muerte’ , un punto crítico en las crecidas del año pasado. Este sistema desviará y almacenará el exceso de agua en embalses, permitiendo su posterior tratamiento y reutilización. Con ello, 700.000 habitantes de Zaragoza contarán con mayor protección frente a futuros episodios climáticos extremos.
En Huesca, se ha puesto en marcha la modernización del sistema de abastecimiento de agua , enfocada en la renovación de una canalización de 5,3 kilómetros en San Julián de Banzo . Con el tiempo, el deterioro de esta infraestructura había llevado a su desuso, obligando a depender de otras fuentes de suministro. Su rehabilitación permitirá recuperar una fuente clave de agua potable, reducir fugas y mejorar la eficiencia del sistema, asegurando un abastecimiento más estable y sostenible para la ciudad.
Optimización del riego en la agricultura aragonesa
En el sector agrícola, la red hídrica es un recurso crucial. En la cuenca del Ebro, la agricultura representa más del 90% del consumo de agua, lo que hace necesario mejorar la eficiencia del riego. Con el uso de tecnología basada en inteligencia artificial, más de 400 agricultores en El Burgo de Ebro y Villanueva de Gállego recibirán información precisa sobre cuándo y cuánto regar, optimizando el uso del agua sin afectar el rendimiento de los cultivos.
Los datos analizados incluyen factores como la tipología del suelo, las condiciones climáticas y el tipo de cultivo, lo que permitirá a los agricultores reducir su huella hídrica y adaptar sus prácticas a un modelo más sostenible. Se espera que esta tecnología reduzca significativamente el desperdicio de agua en el riego, ayudando a mantener la producción agrícola sin comprometer los recursos disponibles a largo plazo.
Además de la eficiencia hídrica, el proyecto busca aumentar la rentabilidad del sector agrícola, permitiendo que los productores tomen decisiones basadas en datos en tiempo real. Esto supone un avance en la modernización del campo aragonés, que enfrenta desafíos constantes debido a la variabilidad climática y la creciente demanda de productos agrícolas sostenibles.
Una apuesta por la sostenibilidad hídrica
Estos proyectos forman parte de un plan más amplio para mejorar la gestión del agua en Aragón, combinando tecnología e infraestructura optimizada. Con estas iniciativas, se prevé que más de 8.100 millones de litros de agua se devuelvan anualmente a las comunidades locales, contribuyendo a un uso más responsable del recurso.
La combinación de inteligencia artificial, análisis de datos en tiempo real e infraestructura renovada marca un paso significativo en la modernización del abastecimiento y la protección del agua en Aragón. No solo se trata de evitar desastres climáticos y mejorar la seguridad hídrica, sino también de impulsar la eficiencia en sectores clave como la agricultura.
