Los datos son omnipresentes: todos los departamentos de una organización acceden a ellos, los consumen, los crean y los analizan para su posterior toma de decisiones. Para aprovechar estos datos y obtener información verdaderamente valiosa, las organizaciones necesitan una estrategia para gobernar y gestionar la calidad de los datos.
Índice de temas
Abordar la era del multi-cloud
Como respuesta al crecimiento de la creación y el consumo de datos, hemos visto cómo muchas organizaciones migraban a la nube en 2022 y esta tendencia continuará en los próximos años. Una de las tendencias más importantes en la gestión de datos es que los proveedores de software seguirán impulsando una mayor migración a la nube y una menor dependencia de los centros de datos locales.
Cada vez más organizaciones adoptarán data lakes
A medida que aumenta el volumen de datos que las organizaciones crean, procesan y a los que acceden, la necesidad de almacenamiento de Big Data también tendrá que cambiar. Hemos visto en el pasado una evolución del almacenamiento local a la nube, y ahora veremos un cambio de los almacenes de datos a data lakes para el almacenamiento de Big Data y ahora incluso a los data lakehouses. Todo esto requiere de complejos procesos de extracción, transformación y carga de los datos.
El auge de la IA y el aprendizaje automático
El aprendizaje automático existe desde hace tiempo, pero es ahora cuando estamos empezando a ver su verdadero potencial. Ya no se trata sólo de inteligencia artificial, sino de cómo los ordenadores pueden aprender de su propia experiencia y hacer predicciones por sí mismos. Es la parte más importante de la gestión de datos porque el machine learning puede hace realidad el procesamiento y análisis de enormes cantidades de datos en poco tiempo. Para ello, utiliza algoritmos entrenados para reconocer patrones en los datos y utilizarlos para hacer predicciones futuras.
Necesidad de una seguridad reforzada
La seguridad es una grave preocupación para las organizaciones, ya que pone en peligro a sus clientes y socios comerciales. Las empresas no sólo tienen que asegurarse de cumplir con las distintas normativas y compliance, sino también de no perder la confianza de sus clientes. Por tanto, el gasto en seguridad está siendo primordial para todas las organizaciones. Las filtraciones de datos son ahora más frecuentes que nunca y no hay indicios de que vayan a dejar de producirse a corto plazo. Las organizaciones tienen que invertir mucho en seguridad si quieren mantenerse actualizados.
Mayor foco en la calidad del dato
A medida que aumenta el número de empresas que confían en los datos para tomar las correctas decisiones empresariales, deben asegurarse de que los datos que utilizan son de alta calidad. Una mala calidad de los datos obligará a una empresa a tomar decisiones de negocio equivocadas, proporcionará información deficiente y dificultará su capacidad para comprender a sus clientes.
Mayor inversión en gobierno del dato
La pandemia de Covid-19 afectó a industrias de todo el mundo y creó la necesidad de realizar transacciones en línea para las empresas. Esto dio lugar a un crecimiento del uso de datos que no ha hecho más que aumentar en los últimos años. Según previsiones de la consultora Mordor Intelligence, se espera que el sector de la data governance crezca a una CAGR del 20,83% entre 2023 y 2028. Por lo tanto, las empresas deben tener el objetivo de orientarse más hacia los datos y mejorar su calidad.