El pasado 14 de julio, la Comisión Europea adoptó un ambicioso paquete de propuestas legislativas para que las políticas sobre clima, energía, uso del suelo, transporte y régimen fiscal de la UE se orienten a la reducción de las emisiones netas de gases de efecto invernadero en al menos un 55% para 2030, en comparación con los niveles de 1990.
En el contexto de la revisión de la directiva sobre eficiencia energética, la Comisión Europea (CE) ha destacado el asunto de la eficiencia energética en el sector de las TIC. La CE también recuerda la necesidad de contar con centros de datos de alta eficiencia energética y sostenibles, así como de establecer medidas de transparencia sobre la huella medioambiental del sector TIC. Con este propósito, la directiva de eficiencia energética insta a los Estados miembros de la Unión Europea a establecer un indicador de sostenibilidad en los centros de datos compuesto por cuatro parámetros: eficiencia energética, proporción de energía renovable, reutilización de cualquier calor residual y uso de agua dulce. Esta propuesta de disposición, sin embargo, es opcional y no tiene una dimensión legalmente vinculante.
Para Arnaud de Bermingham, presidente y fundador de Scaleway, “si queremos cambiar las prácticas de eficiencia en los centros de datos de Europa, tenemos la necesidad urgente de una transparencia radical”. Lamenta “las prisas de muchos centros de datos por poder utilizar el brillo del marketing de los términos ‘eficiencia energética’”. Sin embargo, “detrás de este eslogan se esconden algunas prácticas incalificables, como el derroche de millones de metros cúbicos de agua potable en las torres de refrigeración para enfriar los centros de datos. Este tabú debe ser abordado a nivel europeo y las próximas negociaciones del paquete de medidas del Pacto Verde Europeo suponen un gran momento para lograr avances tangibles”.
“Acogemos con satisfacción el consenso general sobre la necesidad de acelerar la investigación sobre el clima”. Y, sin embargo, para el presidente de Scaleway, “seguimos sin reunir datos observables, fiables y medibles sobre el uso del agua en centros de datos en Europa y en todo el mundo. Esta falta de datos disponibles es un verdadero obstáculo si queremos que la comunidad científica realice una correcta evaluación sobre este fenómeno a lo largo del tiempo, como parte del esfuerzo global para preservar nuestros limitados recursos naturales”.
“En Scaleway, ya hacemos un seguimiento del rendimiento energético de nuestros data centers, y todas las cifras relacionadas están disponibles online en tiempo real. Hacemos un llamamiento al resto del sector de centros de datos en Europa para que se comprometa con nosotros en esta revolución de la transparencia. Estamos convencidos de que este enfoque colectivo puede ser una fuente de factores externos positivos, y definitivamente está generando confianza. Debemos esta confianza a nuestros clientes, a nuestras instituciones públicas, pero también a la sociedad en general y a las próximas generaciones”.