Logicalis asegura en su informe Global CIO Survey que el 80% de las organizaciones en todo el mundo aumentará su inversión en ciberseguridad en el plazo de un año. Según un estudio realizado entre más de 1.000 responsables de Tecnologías de la Información en todo el mundo, la pandemia ha convertido la continuidad del negocio y su resistencia ante cualquier ataque externo en aspectos clave para el 72% de las organizaciones.
La ciberseguridad se ha situado como eje central de actuación de empresas e instituciones, a la vista de que, en el último año, los ataques contra su integridad han aumentado un 25%, hasta alcanzar las 648 amenazas por minuto. La preocupación al respecto no deja de elevarse, hasta el punto de que el 94% de los encuestados prevé sufrir algún tipo de amenaza grave en los próximos doce meses.
Los responsables tecnológicos, pero también el resto de las organizaciones, han tomado conciencia de esta amenaza y en especial temen sufrir brechas de datos y malware (47%) o ataques ransomware (39%), como constata el estudio.
Alex Zaragoza, director general de Logicalis Spain, advierte que “invertir solo en herramientas no protegerá a las organizaciones. Es necesario disponer de políticas y planes de acción que estén preparados para hacer frente a situaciones complejas o de alto riesgo. La mayor parte de las compañías (66%) invierte en cortafuegos, software de protección básico o gestión de contraseñas, pero es insuficiente”, sostiene.
La crisis derivada de la pandemia del coronavirus ha impulsado a las organizaciones a poner en marcha o acelerar su proceso de transformación digital, según la encuesta, para dar soporte a infraestructuras remotas y favorecer el teletrabajo, lo que ha complicado aún más las tareas de seguridad.
Esta tendencia parece que se mantendrá en el futuro y la consultora Gartner ya ha adelantado que el 82% de los líderes de las empresas permitirá que sus empleados sigan trabajando en remoto, al menos a tiempo parcial. La generalización de nuevos modelos de trabajo a distancia complica las tareas de seguridad. Esto explica por qué un 80% de las empresas consultadas ha incrementado su inversión en ciberseguridad en el último año.
Como asegura Toby Alcock, CTO de Logicalis: “En los últimos meses, muchas organizaciones han debido adoptar soluciones parciales para favorecer el teletrabajo y mantener su seguridad y capacidad de recuperación ante desastres. No obstante, y a pesar de que algunas medidas funcionaron, es necesario seguir reforzando estas estrategias, para mantener su seguridad y resiliencia a largo plazo”.
En el informe anual, Logicalis Global CIO Survey también detecta avances importantes en áreas como internet de las cosas (IoT), que ya está presente en 96% de las compañías consultadas. Su aplicación más popular, en un 55% de los casos, es la mejora de la experiencia del cliente, seguido del aumento de la eficiencia operativa (52%) y la mejora de los productos y servicios existentes (46%), como reconocen los consultados.
Como aspecto a mejorar, los CIO subrayan la importancia de implementar planes de recuperación ante desastres. Las cifras indican que menos de la mitad de ellos (45%) ya lo ha hecho y apenas el 40% cuenta con un plan de continuidad del negocio que pueda salvar su actividad ante ataques importantes. Aunque esta prevención de riesgos pudiera parecer a priori un freno a la innovación de los negocios, muchos ven un vínculo claro entre ellas. En concreto, el 95% de los encuestados se sirve de la innovación para crear resiliencia empresarial.
Un buen ejemplo de ello son las migraciones bien planificadas a la nube, que aumentan simultáneamente la seguridad y las nuevas capacidades para desarrollar productos y servicios. De hecho, ya están sirviendo para mejorar la colaboración e innovación entre equipos de trabajo dispersos por diferentes localizaciones.
Como concluye el director general de Logicalis Spain, Alex Zaragoza, “la seguridad integral de los negocios resulta más importante que nunca para anticipar y detectar amenazas. Invertir en seguridad operativa significa disponer de una visión completa de la integridad digital que permita evitar riesgos actuales y se adapte a futuros escenarios”.