El estudio sobre protección de datos a nivel mundial revela que la pérdida de datos y los tiempos de inactividad han costado a las empresas 1,7 billones de dólares en los últimos doce meses, el equivalente a casi el 50% del PIB de Alemania y casi dos veces el de España. La pérdida de datos se ha incrementado un 400% desde 2012, y sorprendentemente, el 71% de las organizaciones no confían plenamente en su capacidad para recuperarse tras una interrupción de sus sistemas.
Los casos de pérdidas de datos se han reducido de manera general. No obstante, el volumen de datos perdidos por cada incidente crece de forma exponencial: el 64% de las empresas analizadas han sufrido pérdidas de datos o períodos de tiempo de inactividad en los últimos doce meses. Todas las empresas han registrado de media más de tres días de tiempo de inactividad imprevisto en el último año. Las interrupciones también provocaron pérdidas de ingresos (36%) y retrasos en el desarrollo de producto (34%).
Las tendencias empresariales, como Big data, movilidad y la nube híbrida, están generando nuevos desafíos para la protección de datos: el 51% de las empresas no cuentan con un plan de recuperación ante desastres para ninguno de estos entornos, y solo el 6% disponen de un plan para los tres. De hecho, el 62% consideran Big data, movilidad y nube híbrida ‘difíciles’ de proteger. El 30% de los datos primarios están ubicados en algún tipo de almacenamiento en la nube, lo que podría provocar pérdidas sustanciales.
Adoptar tecnologías de protección de datos avanzadas disminuye enormemente la probabilidad de sufrir una interrupción. Muchas empresas acuden a múltiples proveedores de TI para resolver este problema. Sin embargo, un enfoque de implementación en silos aislados puede aumentar los riesgos: las empresas que no han implementado una estrategia de disponibilidad continua tienen el doble de probabilidades de sufrir pérdidas de datos que aquellas que sí la utilizan. Las empresas con tres o más proveedores de soluciones de protección de datos pierden tres veces más datos que aquellas con una estrategia de protección de datos unificada con un solo proveedor.
“Este estudio de EMC demuestra que la Protección de la Información es uno de los retos más importantes para las compañías, ya que un 64% de las empresas consultadas admitan haber sufrido caídas que provocaron pérdida de información, con el consecuente impacto en productividad. Las nuevas tecnologías de almacenamiento para entornos Big Data, nubes híbridas y dispositivos móviles aportan un reto adicional para la protección de la información, un ámbito en el 51% de las empresas no tienen implementada una solución” ha afirmado Jesús Velasco, Senior Account Manager, Data Protection & Availability Division de EMC España, durante la presentación.