A pocos días de cerrar el año toca hacer balance. Muchas fueron las cifras que se barajaron para este 2016 en cuanto a inversiones en IT, pero ¿cuáles de ellas se han cumplido?, ¿qué tecnologías siguen sin explotar? Desde Entelgy se ha querido hacer un pequeño repaso de lo que 2016 en materia de TI pudo haber dado de sí y ver si fue así o no.
Ciberseguridad
En 2015, la facturación mundial en ciberseguridad ascendió a los 62.540 millones de euros y se espera que para 2018 esta cifra haya aumentado hasta los 79.292 millones de euros; esos fueron los datos que ofrecía la consultora Gartner hace ahora un año. Pero los augurios parece que se quedaron cortos, y es que también según la propia Gartner, al finalizar este año se habrán invertido un total de 81.600 millones de dólares (76.728 millones de euros) en sistemas y soluciones de seguridad informática, un 7,9% más que en 2014. Una tendencia que viene a consolidar a la ciberseguridad como uno de los principales factores tecnológicos que las empresas tienen en cuenta.
Todo indica que este escenario se cumple también en nuestro país. De acuerdo con las cifras que manejamos desde Entelgy, se observa cómo únicamente en nuestro Centro de Operaciones de Seguridad Avanzada, SmartSOC, se gestionaron, durante el último año, más de 20.000 incidentes de gran impacto y más de 2.000 casos de fraude online, al tiempo que realizó más de 1.200 pruebas de hacking ético y test de intrusión, y más de 5.000 análisis de malware al mes.
Cloud Computing
Otra de las grandes protagonistas del año y sobre la que IDC aseguraba en 2015 que, en 2018, al menos la mitad del gasto de TI estaría basado en la nube, alcanzando el 60% de toda la infraestructura de TI y entre el 60% y el 70% de todo el gasto de software, servicios y tecnología para el año 2020.
Los datos que conocemos este año se asemejan mucho a esa predicción, y es que este año el 43% de las empresas españolas ya está invirtiendo en soluciones y tecnología Cloud, una cifra que continuará creciendo en los próximos meses hasta alcanzar el 50% del nuevo gasto TIC en 2020, según las recientes predicciones de IDC.
Internet de las Cosas
De nuevo según las cifras de Gartner, las previsiones en este 2016 pasaban por tener más de 6.400 millones de dispositivos conectados en todo el mundo; una cifra que preveían seguiría creciendo de forma imparable al menos hasta 2020. En la misma línea se situó IDC y aún fue más allá señalando que este negocio se expandiría hasta los 22 mil millones de dispositivos en 2018, impulsando el desarrollo de más de 200.000 nuevas aplicaciones y servicios de IoT.
Ciudades y coches inteligentes o casas del futuro son solo algunas de las aplicaciones IoT que veremos empezar a implementarse durante los próximos meses y que, incluso, ya podemos observar en algunos sectores, gracias a que las redes son mejores, más fiables, más rápidas y los sensores cada vez tienen mejores precios. Un potencial ya con aplicaciones reales, lo que parece confirmar que, aunque a día de hoy es una tendencia tecnológica no demasiado aterrizada, el Internet de las Cosas tiene un notable recorrido por delante.
Big Data
IDC calculaba el año pasado que el negocio que se moverá en servidores, almacenamiento y recursos cloud utilizados para actividades relacionadas con el Big Data en la región EMEA se iba a triplicar de cara a 2019, alcanzando los 5.400 millones de dólares dentro de apenas tres años.Y parece que no le faltará razón. Si nos centramos en cómo está evolucionando este mercado actualmente vemos cómo, según Gartner, el 48% de las organizaciones han invertido en Big Data a lo largo de 2016, un 3% más que en 2015. Cifra que también concuerda con el análisis de Ovum que apunta a que, durante este año, el Big Data ha movido unos 1.700 millones de dólares a nivel global, tendencia que además se espera se consolide y aumente en los próximos años, en los que un correcto uso de los datos será uno de los ejes capitales sobre los que se cimenten las empresas.
Wearables
Según IDC, en 2015, 39,5 millones de estadounidenses adultos utilizaron dispositivos portátiles, incluyendo smartwatches y rastreadores de fitness, lo que suponía un aumento del 57,7% respecto de 2014. Según la firma de investigación, ese crecimiento continuaría en 2016 y se incrementaría en 2018 con 81,7 millones de adultos que utilizarán este tipo de dispositivos inteligentes. Los datos no se han acercado a las previsiones, sino que las han pasado por encima, y es que IDC asegura que, según sus estimaciones, estos dispositivos podrían alcanzar las 101,9 millones de unidades a finales de año. Esta cifra representa un crecimiento del 29% respecto a las conseguidas en 2015. La consultora también coloca la tasa anual de crecimiento (CAGR) en un 20,3%, lo que supondría llegar a las 213,6 millones de unidades distribuidas en 2020. Un dato tremendo en comparación a las predicciones que estimaban para 2018 que 81,7 millones de adultos utilizarían wearables.