Infinidat ha hecho público un listado de claves en materia de almacenamiento y gestión de datos a tener en cuenta por parte de los equipos de TI en las circunstancias actuales de incertidumbre financiera. Ante la situación generada por la covid-19, McKinsey & Company presentaba recientemente hasta nueve escenarios diferentes sobre posibles curvas de recuperación económica basadas en la efectividad de las distintas políticas.
“La incapacidad de los proveedores de TI para entregar el hardware de manera oportuna –lo cual, en la actualidad, está al orden del día– puede hacer que la empresa llegue tarde al mercado con su iniciativa estrella”, explica Israel Serrano, Country Manager de Infinidat Iberia. “Y todo esto en un momento en el que, por primera vez en más de una década, el gasto en TI va a decrecer”. Según previsiones de Gartner, el gasto mundial en TI se reducirá en 2020 un 8% respecto a 2019.
Ante esta incertidumbre financiera, los expertos de Infinidat recomiendan tener en cuenta algunas claves de eficiencia en rendimiento y costes:
• Costes. Las compañías están reconsiderando sus inversiones en TI y buscan obtener más por menos. Esto pasa por buscar oportunidades de consolidación para mantener menos sistemas más rentables, automatizar procesos para liberar al personal de TI o renovar el esquema de precios.
• Liquidez. Mientras que, en el pasado, la infraestructura se adquiría teniendo en cuenta las necesidades a tres o cinco años, en la actualidad lo imprevisible de la demanda requiere que TI contenga al máximo el gasto para que éste se realice sólo hasta que haya necesidad. La clave está en mantener la liquidez tanto como sea posible.
• Time-to-market. Las unidades de negocio están bajo presión para conseguir nuevas fuentes de ingresos, nuevas oportunidades y mantener el negocio en funcionamiento. Esto crea un clima de incertidumbre para los departamentos de TI, que necesitan diferir las inversiones hasta que exista una clara necesidad y al mismo tiempo respaldar la velocidad que requieren las unidades de negocio para capitalizar las nuevas oportunidades.
• Pricing. Generalmente es menos costoso comprar infraestructura en modo CapEx (como inversión en capital). Sin embargo, la incertidumbre del mercado puede hacer que la flexibilidad de las compras en modo OpEx (como gasto operativo) sea más atractiva, ya que es imposible planificar la infraestructura con anticipación cuando no se sabe dónde se debe priorizar la reducción de los costes de infraestructuras y dónde exactamente se deben evitar los compromisos a largo plazo.
• Personal y gastos de administración. Algunas empresas se verán obligadas a hacer recortes en sus equipos de TI, lo que aumentará la carga sobre los miembros restantes del equipo y, como resultado, ralentizará algunos procesos de negocio. Los responsables de TI tienen que actuar rápido y encontrar formas de consolidar los componentes de su infraestructura para minimizar la cantidad de puntos de gestión y compensar la reducción de personal.
Redefiniendo el rol de la nube privada
Ante estos retos, las empresas están barajando varias opciones. Una de ellas es llevarlo todo a la nube pública. A juicio de los expertos de Infinidat, esta opción es ventajosa para las grandes empresas, pero no para las pequeñas y medianas empresas, que en muchos casos no pueden asumir su coste. Otra opción es realizar inversiones a corto plazo, lo cual puede ayudar a diferir costes de infraestructura, pero normalmente suele propiciar la creación de silos aislados que requieren más gestión y son más difíciles de automatizar.
A fin de solventar esta disyuntiva, Infinidat propone redefinir el rol de la nube privada. “La mayoría de las empresas ya operan en entornos de nube híbrida, y ejecutan diversas cargas de trabajo ‘on premises’, dentro de su nube privada”, explica Israel Serrano. “Aquellos líderes de TI que estén dispuestos a redefinir su estrategia encontrarán el punto óptimo entre la agilidad de la nube pública y la rentabilidad de la nube privada”.
Para ello Infinidat propone un modelo de pricing elástico que ofrece a los responsables de TI diferentes opciones de consumo, incluyendo fórmulas de “pago por uso” típicas de la nube pública para poder aumentar o reducir instantáneamente dicho consumo en base a los proyectos que surjan.
“En el desafiante panorama actual, el cambio es inevitable”, explica Israel Serrano. “El rol de las TI es apoyar al negocio en estos tiempos inciertos, pero se requieren nuevas estrategias de inversión que permitan a la organización minimizar activamente los riesgos y al mismo tiempo adaptarse a las condiciones cambiantes del mercado”. “Al reinventar su nube privada utilizando nuevos modelos de consumo híbrido, las empresas podrán obtener la agilidad necesaria para mantener su negocio competitivo y aprovechar las nuevas oportunidades a medida que se presentan”.